Seitan con membrillo y castañas.

Este es un plato con ingredientes poco corrientes en una cocina diaria; es muy sencilla y merece la pena lanzarnos a probar otros productos.

Soy una enamorada de las especias y los platos vegetarianos, pero cuando intentamos hacer dietas vegetarianas, solemos dedicarnos a comer verduras y ensaladas y nos olvidamos de añadir proteínas.
El seitán tiene gran contenido en proteínas y más calcio y minerales que la carne.
El membrillo  combate la hipertensión, el colesterol, el ácido úrico, trastornos gástricos, ayuda al sistema nervioso y muscular, y encima es bajo en azúcar y calorías.

Y  las castañas: menos calóricas que cualquier otro fruto seco, y ricas en vitamina B, hierro y potasio.
¡Vaya!, casi tenía que haber empezado con: ¡Aquí va un plato medicinal!.
Pero, realmente lo que mas me atrae son los perfumes de este plato. Da gusto los aromas que escapan por toda la casa.

EL MERCADO
8 Filetes de seitán.
2 membrillos grandes
24 castañas o 1 bote de castañas asadas o cocidas.
6 cucharadas de guisantes
jengibre fresco (un pedazo de 2 cm)
1 cebolleta
1 rama de canela
2 cucharadas de anís
1 cucharadita de curry
1 vaso de vino blanco
1 vaso de agua
aceite de oliva virgen extra
sal

PREPARACION
Rallar los 2 cm. del jengibre, mezclarlo con el curry y con dos cucharadas de aceite. Untar con esta mezcla el seitén. Dejarlo reposar para que se empape de los aromas.

Pelar los membrillos, cortarlos en cuartos y cocerlos en el vino, el agua y la canela durante 30 minutos, que queden tiernos pero cuidado no se deshagan.

Hacer un corte en la cara plana de las castañas y cocerlas en agua con sal y anís durante 20 minutos. Este paso nos lo saltaremos si hemos comprado las castañas cocidas o asadas.
Pelarlas y rehogarlas en un poco de aceite hasta que queden doradas.

Picar la cebolla y  a los 2 minutos añadir los guisantes y el anis estrellado  mantenerlo al fuego hasta que estén tiernos.

Pasar por la plancha el seitán, vuelta y vuelta, con una gota de aceite.
Servir con las castañas, el membrillo y el jugo que hayan soltado y los guisantes con su cebollita.

Bueno, y para rematar una noticia y un consejo, apartar un trozo de membrillo crudo pelado y... aplicarlo en la cara. ¡Sí, también "quita" las arrugas!. ¡Increíble!